lunes, 23 de septiembre de 2013

Ingrid y Manuel ayuda a damnificados

La Tormenta “Ingrid” y el huracán “Manuel” provocaron  inundaciones en 171 municipios el presente septiembre del 2013. 9 estados en declaratoria de “desastre” y 6 más de “emergencia” por lo que son miles las personas damnificadas que necesitan de nuestra ayuda.
Si bien nuestros impuestos deberían cubrir este tipo de desastres, el gobierno es poco lo que aporta de estos recursos, aunque es de tomar en cuenta la movilización del ejército y fuerzas ante estos hechos. Nos encontramos entonces ante la necesidad de escuchar esos gritos de “auxilio” para voltear a ayudar nosotros mismos a esta gente.
También es innegable la corrupción ante el robo de despensas y desvío de productos para su venta ilícita en un abuso sin nombre, pero esto no debe detenernos para realizar una aportación, porque algo les ha de llegar y lo sabemos por gente conocida que ha visto cómo es verdad que llega la ayuda, aunque existan todo tipo de casos, es mejor brindarla a que no exista.
Desde el pasado miércoles se instaló un centro de acopio por un Moto Club, como muchos otros y como muchas otras instituciones, apelando a la “hermandad” que se pregona entre motociclistas para captar recursos y proporcionar un “granito de ayuda” para el apoyo de la gente necesitada. Por medio de las redes sociales se convocó al evento, logrando llenar una camioneta para tan noble causa. El domingo en punto de las 12:00 am la caravana de motocicletas salió hacia la Cruz Roja de Polanco, lugar al cual llegaron con orden para estacionarse sobre Homero y así no impedir el libre tránsito de vehículos que llegaban a dar su aportación sobre la calle de Luis Vives, la mayoría de motociclistas caminaron hasta el helipuerto donde se descargó dicha camioneta, dejaron sus cascos y chamarras sobre la jardinera en cuanto una persona de esta dependencia requirió una cadena humana para seguir descargando los vehículos que iban llegando, inmediatamente y con gusto armaron dicha cadena. Entre risas y euforia por la adrenalina que causa la emoción de brindar ayuda, esta cadena humana permaneció alrededor de tres horas en dicho lugar, aportando así mismo “un poquito de ayuda”, como ellos mismos decían, para luego retirarse y dejar pasar a los relevos a eso de las 15:00 hras.
El grupo coincide que no solo es rodar y reunirse por un gusto en común que es el motociclismo, así mismo están motivados para brindar “lo que se puede” en “solidaridad de hermanos paisanos”, conformando así una más de las características que poseen los Moto Clubes de hoy en día.
Fue hermoso ver como fluían los vehículos de todo tipo de gente, desde vehículos de lujo, camionetas de carga, SUV’s, así como la gente a pie que llegaba con varias bolsas del súper o solo una bolsa de arroz pero ávidos de brindar su ayuda preguntando “¿qué puedo hacer? ¿dónde me registro? Traigo mi credencial de elector”. Aún existen mexicanos que NO ESTÁN ENFERMOS DE PODER Y AVARICIA, hay mexicanos que a pesar de que no tienen casi nada, aportan al menos, sus manos para hacer algo en pro de los damnificados, aún existen buenos seres humanos a pesar de este país que cojea de los líderes ambiciosos, personas que se llenan el alma y el corazón al dar una simple aportación a la medida de sus capacidades. Todo un ejemplo de vida que estamos viviendo en medio de la tragedia que la madre naturaleza nuevamente nos ha puesto para probarnos una vez más, para ver de qué está hecho el mexicano.
Gracias a todos aquellos mexicanos y extranjeros que de una o de otra forma han colaborado en esta lucha, de verdad gracias por todos aquellos que no alcanzan a hacer llegar dicho agradecimiento. ¡Gracias! Y sigamos apoyando.

A quienes deseen donar, se les aconseja lo siguiente, después de vivir esta experiencia:
-Primero que nada escriban con marcador permanente sobre todos los artículos, cualquier leyenda como: “Prohibida su venta. Es para ayuda a damnificados”.
-Si compran, por ejemplo, una caja de galletas Marías con 5 tubos adentro, abran la caja y escriban sobre cada tubo, ya que dicha caja será abierta y repartida hacia cada despensa. Pudimos ver como muchas cajas venían marcadas afuera, pero adentro la mercancía no y dichas cajas con la leyenda no se mandaban.
-Muchas etiquetas como las de las latas de atún o verduras, venían rotas hasta la mitad, tan solo para ver de qué producto se trata y en la lata venían estas leyendas. A otros objetos, les borraban con thiner la marca o una parte y sobre esto ponían dichas leyendas. Lo anterior es una medida desesperada para evitar el robo y posterior venta de dichos artículos.
-Al estar en este centro de acopio pudimos ver que todos los artículos los van seleccionando y dividiendo por categorías como, latas, semillas, limpieza, aseo personal, paquetes en bolsa de comida, etcétera, ya que la cruz roja cuenta con unas cajas donde arma las despensas lo más surtido posible, por lo que se les suplica llevar clasificada su mercancía para agilizar el reempaque de esta.

La Cruz Roja recibe la ayuda de voluntarios, sin niños menores de edad. Se debe acudir a registrarse para que se les asigne una tarea.