En Marzo, En Eje 3 Sur José Peón Contreras y su continuación Baja california, se realizaron maniobras de “embellecimiento y seguridad del asfalto y vía pública”, pintando muy bien las líneas divisorias de los carriles y colocando entre ellas los llamados “fantasmas” (pequeñas placas rectangulares que al ser iluminadas por la luz de un automóvil brillan para acotar los carriles), por las noches se veía además de lindo, seguro para la definición de carriles. Esto se podía ver todavía hasta el domingo 25 de abril, sobre el Eje 3 sur, a partir de Monterrey en dirección a Insurgentes ya que en el tramo hacia atrás sucedió lo siguiente: Hace 2 semanas en el tramo de Tlapan-San Antonio Abad hacia el poniente, comenzaron las obras de reencarpetamiento del Eje 3 sur, sí leíste bien, después de pintar muy bien y de poner fantasmas a lo largo de esta vía, llegaron máquinas las cuales trabajaron por la noche para no entorpecer el tráfico, pero sí el sueño de quienes viven por la zona, para quitar una “capa de pavimento maltratado” (el cual volverá en unos meses a ser maltratado por su pésima calidad), llevándose consigo las líneas blancas y los fantasmitas que tan bien se veían de noche y que no habían durado ni un mes para pavimentar toda la avenida. El asfalto como siempre no queda bien, por ejemplo, en sus uniones se siente al viajar en automóvil el “bordo”, y para variar, las coladeras: o quedan como baches que te dañan la suspensión, o quedan como topes que invariablemente maltratan los vehículos. Si quieres saber entonces en qué se desperdician parte de tus impuestos, he aquí la imagen clara: “primero ponemos unas líneas bien bonitas y fantasmitas para que vean que sí trabajamos” y después: “¡chin! Se nos olvidó que en abril eran las obras de reencarpetamiento, ni modo, hay que trabajar”, dirían los que toman las decisiones, pero, ¿realmente se les olvidó o fue mala planeación?.
Lógica común: ¿qué no era de pensarse que primero reencarpetaran y luego pintaran y pusieran los fantasmas?
Economía inteligente: Hay que volver a pintar y poner los fantasmitas, gastando un extra (que también va a sus bolsillos), claro está, y eso si se acuerdan de pintar, más no de cobrar, pero eso sí, tal vez de los fantasmas sí se olviden porque “ya no entran en el presupuesto” para el gasto, pero nuevamente sí para el cobro.
Ya les comentaré qué sucedió, pero así es como las obras públicas se manejan, y luego los mandatarios se quejan del porqué ya no se les cree nada o pierden popularidad de voto pues hacen enojar a la población, con decisiones “no planeadas”, según dicen ellos que es por falta de comunicación, ¡sí como no!
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