¡A qué precio!

¡A qué precio!

¿Cómo podemos entender cuando la gente nos dice que la estamos regando? ¿Cómo podemos discernir y darle la espalda a tantas emociones que estás viviendo si temes perderlas? ¿Cómo es posible si crees que debes darte la oportunidad de vivirlas? La respuesta es ying yang. Sí, pues por un lado es muy difícil y por el otro lado es muy fácil. Si te sales de ti mismo y comienzas a observarlo todo de una manera objetiva, fría, justa, serena y madura la respuesta será muy sencilla: ¡ALÉJATE!, corre a los brazos de tu pareja y olvídalo, arráncalo a tiempo. Pero si sigues neceando jamás lo lograrás, pues en medio de todo lo que estás sintiendo te negarás a ver tu error, pues estás completamente drogado.
Cuando pasó lo de E, esta persona se negó a verlo, se lo dijimos muchas personas, amigos y familiares y su misma ex pareja le dijeron que algo pasaba y que la estaba regando, pero no hizo caso, pues esa sensación, esa emoción, lo halagador que resulta que te traten bonito, lo emocionante de lo prohibido, esos besos y esa pasión, provocan en ti un veneno que no puedes comprender y el cual te rehúsas dejar de sentir, te vuelves lo que no eres y olvidas lo que tenías, te vuelves sordo, necio, testarudo, mientes aunque no era tu costumbre ni tu educación, te trastornas, te transformas y cada vez que te reclaman te molestas, cada vez que te quieren orientar y ayudarte a recapacitar, lo niegas todo, te quedas callado, hasta que todos los lazos se rompen. Pierdes la confianza de tus amigos, de tu familia, ¡lo pierdes todo por la mera pasión! Entonces surge el engaño, el cual puede terminar en un corto tiempo, o en una relación, la cual, la mayoría de veces está destinada a tronar.
Esta persona no mentía, no traicionaba, venía de una relación de 5 años en los cuales siempre fue fiel, pero se atravesó alguien, alguien que le envolvió de tal forma que traicionó hasta sus mismos conceptos, sin decirle al mundo de personas que le rodeaban: ¡nunca debió haber sido así! Debió sentarse a pensar, debió no haber permitido que se le llenara el cuerpo de hormonas y le bloqueara las dendritas, pues solo quería estar con J, si claro, no vivía consigo, era el principio, justo al principio donde te puedes detener, más también es ese punto en donde ambas personas lo dan “todo”, por conquistar, sobre todo lo que tu pareja no te da. Te desvives y se desvive por llenar esos “huecos” que te faltan en la vida y te trata súper genial, su piel, sus ojos, todo lo que esta persona es, es magia, es realmente esas sustancias corriendo por el cuerpo. No vive contigo, no tiene que pagar cuentas, pasa por alto todos tus defectos, y como es poco el tiempo que estas con esta persona, tratas de que sea lo mejor posible, resumiéndose en algo parecido a la Promiscuidad, grave pecado para los católicos, gran error para un ser humano.
A pesar de que le habían puesto el cuerno, esa vez le tocó hacerlo a esta persona, pensando tal vez, NO perdón, ahí no se piensa, más bien, dejando que todo fluyera de la forma errónea en que estaba marchando, pero ahora, con la cabeza fría, con la experiencia su edad y con lo que acababa de suceder, comprendió su gran error:

“Yo no me arrepiento del todo de estos 4 años, a pesar de la traición que recibí, pero sé muy bien que la vida giró y me castigó por lo que le hice a mi ex E en ese entonces y yo pagué, como siempre, la factura, justamente claro está. No importa que la vida te haya hecho mil cosas, si tú haces algo mal, de todas formas te lo cobra aunque resulten números rojos y aunque por otra parte los malos siempre se salgan con la suya el día de hoy. En ese entonces debí haberme frenado, debí haber cerrado puertas, debí estudiar la balanza de mi vida y tomar decisiones frías. Si era real lo que sentía por J, entonces ni J ni yo, pues ambos tenemos la misma culpa, debimos herir a la gente así. Si de verdad era algo real, debí haber hablado primero con E y decirle que no estábamos bien y luchar por última vez, antes de destruir, aunque el destino le tenía el gran consuelo de un buen amor, que irónicamente fue la ex pareja de J. Si de verdad era algo real, J me hubiera esperado, y yo sin haber sido infiel, hubiera terminado en los mejores términos, pues como le dije, eran 5 años y la relación pasaba el delgado puente hacia la llama azul, sí, aún le amaba, sí, también me amaba, pero la destruimos J yo e incurrimos en el “daño a terceros”.
¡Dios!, es tan difícil vivir eso, E se fue, sé que le dolió mucho, pues A mi compañera de trabajo, me dijo que vio llorar a E, justo como yo lloraba por J, aunque solamente ella y yo sabemos la intensidad del dolor. El problema era el daño irreparable, a pesar de que continuó con su vida, el daño se queda en el alma y en el corazón y eso nada ni nadie te lo quita, pues fue algo que viviste.
Por mi lado la gente se alejaba, el día del cumpleaños de un familiar, ahora lo han aceptado, dijeron que solo querían hacer sentir mal a J, o algo así, puesto que sabían que estaba mal lo que hacía. Ellos se habían decepcionado de mí y siendo amistades compartidas de E, J como la cabronez andando, como quien se había metido entre dos personas que estaban bien y yo como la quien lo había permitido. ¡cómo da vueltas la vida! ¡y a qué precio te quedas con el enamoramiento! Pues nos quedamos en soledad, sin amistades casi un año y tal vez hubiera sido mejor.
Un día estás con tu pareja, te levantas, te besa, te ama, al siguiente esa persona ha probado “ese veneno”, ese que le aleja de ti, viene drogada con la oxitocina que te unió a ella, le desconoces, sientes el cambio, pero te lo niega, esa persona a la que tanto amaste, en la que tanto confiaste se ha vuelto alguien más, y no es que te haya dejado de amar, ¡NO!, ahí está el sentimiento, pero está drogado, está cubierto por las mil emociones de la “nueva entrada”, así como me sucedió a mí y no defendí a mi E, así como le sucedió a J y no defendió a su B.”

-Justamente aquí, justo aquí era donde J debió de haberse detenido, haber dicho ¡NO!, ya tenía la experiencia de lo sucedido, ya sabía a dónde iba todo esto, ¿pero quién nos enseñó que debe ser así?, ¡NADIE!, por eso le concedes el beneficio de la duda, por eso sigues adelante a pesar de que te mata la incertidumbre y los celos, ¡caray! son muchos años de confianza ¿cómo te puede traicionar? ¡ES LA MALDITA OXITOCINA! ¡ES EL MALDITO “NUEVO” QUE SE SIENTE GENIAL! ¡ES LA EXCITACIÓN DE LO PROHIBIDO” (como se los puse en la liga de lo de la oxitocina). ¡No señoras y señores! ¡está mal! No puedes andar por la vida destruyendo gente por volver a sentir eso, no podemos dejar de inculcarles a los hijos los valores y la forma de vivir y amar de verdad, porque gracias a que nadie nos enseño que podía suceder, ¡o nos lo hacen, o lo hacemos!. La gente se decepciona de ti, te vuelves un “perro del mal”, pierdes tus valores, si eras metódico, si eras justo, si no te gustaba lastimar a la gente, ¡terminas haciendo todo lo contrario y negándolo! Insisto, debería de haber una multa, un castigo, para que todos lucháramos hasta el final, y pensáramos ¡de verdad! en no incurrir en el error, sobre todo cuando dejas de lado relaciones construidas con tanto esfuerzo de ambas partes. Sí lo de E y esta persona andaba ya un poco malo, pero había aún un gran amor, debieron pedir ayuda, debieron luchar por arreglarlo, pues las bases eran correctas y su relación tenía lo suficiente para seguir adelante, así como muchas donde se termina por un cuerno y solo decimos: “cómo demonios sucedió”, entonces éste era el justo momento donde tú con J debíste de haberte detenido, justo el momento donde J debió de haberse detenido. A lo que me respondió:

“Ok,yo andaba cojeandoen mi otra relación con E, pudo arreglarse, tal vez, pero la cuestión aquí es que si yo quería algo nuevo, ¿debí ser honorable y hablarlo?, claro, ahora lo veo, me olvidé de todos mis valores y traicioné, hice lo que no quería que me hicieran y eso fue atroz. No, no salí impune, pues la vida me lo acaba de cobrar y de la misma forma.
Lo que quiero enseñarle a la gente, para quienes se encuentren en mi caso, o algo similar, es “a qué precio” puedes quedarte con alguien y porqué hacerlo de la peor manera, de la peor forma. ¿Por qué castigar a un ser humano que te ha dado tanto, hacer que día a día viva en la incertidumbre, en la desdicha de tu abandono? ¿por qué desgastarlo en la noche, por la mañana, cada vez que está pensando en la razón, o en el ¿qué puedo hacer para que esto suceda? ¿qué necesidad de destruir a quien amaste y te amó tan solo porque has olvidado lo que sientes, por una emoción nueva?, es más no lo has olvidado, solo lo haz echo a un lado. Y no te importa lo que te digan tus amigos, tu papá, tu mamá, no te importa que te digan que estás mal, sigues adelante con la traición, con el engaño y en esos momentos eres el ser más despreciable del planeta, pero estás ciego y no lo ves, o no lo quieres ver por ese veneno, por esa emoción y la solución duele, pues tendrías que sacrificar esa emoción, tendrías que alejarte de la persona nueva y te molesta tanto dejar de sentir eso, y te encabrona pensar que no lo lograrás. Ahora lo entiendo, ahora que estoy del otro lado comprendo tanto que quiero que la gente lo vea, lo sepa y evite herir a toda costa”

-Así es, si la persona dañada intenta, o desea suicidarse por el abandono, tú que estás en tu zona de confort con tu nuevo “alguien” tan solo piensas “¡qué egoísta de su parte!, no me deja ser feliz”, piensas en que ya no es tu “responsabilidad” y le hechas las culpas que son tuyas, cuando en verdad uno es responsable de la persona que te ama cuando tú mismo generaste ese amor, tal vez por la buena y sin engañar salgas de la relación y digas “no es mi responsabilidad que se quiera suicidar”, pero sí lo es, tu egoísmo no te deja verlo, y por lo vivido, y por humanidad, debes evitar que se haga daño, en la medida de lo posible para una separación saludable.
En el peor de los casos, se logra cometer suicidio, en la desesperanza de que ese ser amado no se olvidó del veneno o del rush y no regresó a ti a pesar de que te humillaste, de que le prometiste lo que fuera (aunque en este punto ya no lo merece porque es de inframundo al haberte traicionado). Tal vez entonces surja el arrepentimiento, tal vez entonces como en esa canción de: “me acuerdo” de Vico C, aunque tal vez sea demasiado tarde:

Me acuerdo de la noche en que tú me conociste,
todas las caricias agradables que me hiciste
me acuerdo de todas las palabras que dijiste
diciéndome en secreto que el amor sí existe,
Pero con el tiempo el libreto cambió
pues la malicia como siempre pasa, se involucró
y yo un ser humano como los demás seres,
adopté el punto débil del hombre, mujeres,
ya en ese tiempo no pensaba muy bien de la pasión
por exceso parecía un rehén
te ahogabas en tus lagrimas y en tus sufrimientos
Yo no sé lo que pasaba con mis sentimientos,
luego escuché a todo el mundo decir
que por mí, la vida te ibas a destruir,
yo no creí en tu palabra, te ignoré como a un perro
Y mírate ahora, mañana es tu entierro,

Tal vez y solo entonces se pudiese despertar de ese momento maligno, como en la canción, donde por un gran golpe que te da la vida, es cuando comprendes, cuando recuerdas lo que tenías y el error que habías cometido, pero pocas veces pasa, y sí pasa así, en la realidad. Recuerdo una vez que me invitaron a casa de una amiga, salimos a su balcón que colindaba con el de la casa de al lado, en ella había una cruz de flores y unas veladoras, le pregunté, me contó que ahí vivía una chica, que se casaría con su novio de años de relación, que los dos se veían enamorados a pesar del tiempo, a pesar de que las malas lenguas alegaban que él tenía a alguien más, alguien reciente, ella le había reclamado, él había negado todo, ella le dijo que él era el amor de su vida, que por favor dejara a quien fuera, el lo volvió a negar diciéndole que ella lera también el amor de suj vida y que de verdad la amaba a pesar de las malas lenguas, ella le dijo, que sin él se moriría, y que si la engañaba, de verdad se moriría, él lo negó nuevamente jurándole amor, pasara lo que pasara. Una noche hubo una fiesta y corrieron a contarle el chisme de que su galán estaba ahí con la vieja esa, ella, a escondidas fue a buscarlo, a lo lejos lo vio al fin con la otra, cuando se suponía que estaría en su casa, y que no iría a la fiesta porque estaba cansado de trabajar, ella salió corriendo llegó a su casa, escribió una carta donde relataba lo sucedido, salió al balcón, colgó una cuerda y con la foto de él en su puño, colgó su vida en esta cuerda a la vista de quien pasara como testimonio de la traición y engaño. Esa misma noche él llegó a buscarla, pues a pesar de todo la amaba y sintió buscarla por la discusión que habían tenido, al llegar la vio en el balcón y sus gritos de dolor y desesperación se escucharon muy lejos. Algunos dicen que en el funeral él se quería morir y le gritaba que lo perdonara y que se arrojó sobre la tierra intentando escarbar gritándole que la otra no era nada, que era ella a quien amaba, pero digo yo ¡ya para qué!
¿Qué necesidad, insisto, de que suceda algo grave para que la gente reaccione? Lo malo es, que como no sucede nada “grave”, la gente sigue haciendo lo suyo y no despierta, no escucha y necea.
Hoy en día E es feliz con su B, irónicamente juntaron sus vidas, al menos eso le da consuelo a esta persona. “ Yo me he convertido en algo raro, que se desconecta y solo cumple con lo cotidiano” comenta, “como un zombie, que podrá llegar al final de sus días en un vacío. Hace unos días veía la tv sin mirar, y estaba futurama, el capítulo donde Jim (creo que así se llama), quiere revivir a su perro, pero justo cuando lo va a hacer, dice que no, que para qué, pues seguramente como era un perro joven tendría una vida feliz al lado de los padres de Jim, en eso te pasan, que el perro hizo todo por encontrar a Jim y lo encontró en la cámara de criogenización pero justo cuando lo había encontrado, los papás de Jim llegan por él y sin darse cuenta que en la cámara está Jim, a pesar de que el perro la rasga y le ladra, se lo llevan diciéndole, “vámonos, debemos seguir buscando a Jim”, se lo llevan, el perro se queda sentado afuera del negocio de los papás, y se ve como los años pasan, y todos envejecen, el perro casi ni come, y muere esperando a Jim sin moverse del lugar.
Así tal vez terminará mi vida, esperando a ese alguien que nunca regresará, o tal vez mis intentos fallidos por irme, resulten, no lo sé.
Hoy solo sé, que debería de haber un alguien, a quien todos hiciéramos caso, una persona muy sabia y que de verdad nos guiara y nos persuadiera de cometer cualquier error, un alguien, una pócima, un algo, para evitar seguir regándola, marchitando vidas impunemente, pero no lo hay, solo un gran golpe, te hace a veces, y solo a veces, recapacitar”

-Consejo: antes de sentir el rush, justo cuando comiencen a sentir algo “raro”, aléjense, corran al lado de quien duermen, al lado de esa persona que los ama, pídanle, háblenle para que luchen por su amor y arreglen sus pendientes, que rara vez, si has durado tantos años, son irreparables.